El comercio electrónico ha evolucionado de forma muy positiva durante los últimos años de forma que, actualmente, según datos de la CNMC, el 55% de las transacciones que se realizan desde España son con el exterior y el 13,9% desde el exterior con España. Esto supone que muchas empresas trabajan en varios países, por lo que entra en juego la fiscalidad internacional.
Además, la globalización ha permitido que empresas de distintos tamaños, no solo las grandes multinacionales, tengan acceso a mercados internacionales. Hoy en día, las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) también pueden ofrecer sus productos y servicios fuera de las fronteras nacionales gracias a plataformas de comercio electrónico y soluciones logísticas que facilitan las exportaciones. No obstante, este nuevo contexto internacional también trae consigo desafíos en cuanto a la fiscalidad, ya que cada país tiene sus propias normativas.
Por tanto, gestionar adecuadamente la fiscalidad de diferentes jurisdicciones es esencial para evitar sanciones y optimizar el cumplimiento de las normativas fiscales. En este artículo te contamos qué es la fiscalidad internacional, en qué principios se basa y a qué retos se enfrenta.
¿Qué es la fiscalidad internacional?
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La fiscalidad internacional es el conjunto de leyes y otras normas que se aplican a profesionales y empresas que realizan una actividad económica en varios países.
Además, la fiscalidad internacional no solo afecta a las empresas que operan físicamente en otros países, sino también a aquellas que prestan servicios digitales o venden productos a través de plataformas online a clientes en otras jurisdicciones. Con el auge de la economía digital, muchos países han implementado nuevas normativas para asegurar que las empresas que no tienen presencia física en su territorio, pero generan ingresos de sus residentes, también paguen impuestos. Para poder tributar de forma correcta es fundamental saber qué normativa fiscal se aplica y qué acuerdos de doble imposición existen.
Debemos recordar que la fiscalidad internacional afecta a todo tipo de empresas. Entre otras, las siguientes:
- Empresas que funcionan online ofreciendo productos o servicios en varios países.
- PYMEs que exportan productos.
- Empresas dedicadas al transporte de mercancías a nivel internacional.
- Empresas de restauración, moda u hospedaje que tienen sucursales en otros países.
¿En qué principios se basa la fiscalidad internacional?
Existen varios principios clave que rigen la fiscalidad internacional y se deben tener claros para saber cómo tributar. Son los siguientes:
Principio de residencia fiscal
En base a este principio, una persona deberá tributar donde tenga su residencia fiscal. Para determinar dónde está la residencia fiscal se consideran elementos como:
- El lugar en el que la persona está más tiempo a lo largo del año.
- El lugar en el que están sus intereses económicos.
- El lugar en el que vive la familia de esa persona.
En el caso de las empresas, la residencia fiscal se determina principalmente en función de dónde está la sede de dirección efectiva de la compañía, es decir, el lugar donde se toman las decisiones clave. Sin embargo, es importante tener en cuenta que algunas jurisdicciones podrían aplicar reglas más estrictas, como la necesidad de registrar una filial local si las actividades de la empresa en el país son significativas.
Doble imposición internacional
A nivel internacional, existen acuerdos entre países para evitar que los mismos ingresos sean gravados tanto en el país de residencia como en el país en el que se ha generado el ingreso. Para evitar la doble imposición, se suelen regular exenciones en uno de los países a través de convenios de doble imposición internacional.
Transparencia fiscal internacional
Implica que las jurisdicciones de distintos países pueden intercambiar información fiscal de manera automática para prevenir la elusión fiscal y mejorar la cooperación en la recaudación de impuestos.
El intercambio de información es fundamental para combatir el fraude fiscal y garantizar que las rentas obtenidas en el extranjero se declaren correctamente.
En los últimos años, la OCDE ha impulsado la creación de normas globales como el Estándar Común de Reporte (CRS), que obliga a las instituciones financieras a compartir información sobre cuentas de no residentes con las autoridades fiscales de los países correspondientes. Esto ha facilitado enormemente la detección de posibles fraudes y el cumplimiento de las obligaciones fiscales.
Precios de transferencia
Son normas que aseguran que el intercambio de bienes y servicios entre filiales de una empresa que se encuentran en distintos países se haga a precios de mercado. De esta forma se evita que se realicen acciones para pagar en jurisdicciones con mejor carga fiscal.
¿A qué retos a los que se enfrenta la fiscalidad internacional?
Existen una serie de factores que influyen de distinta manera en la fiscalidad internacional y que suponen un reto para las asesorías dedicadas a este tema. Son los siguientes:
Tamaño de la organización
Las grandes multinacionales suelen tener a disposición suficientes recursos para crear sucursales o filiales en otros países y optimizar su carga fiscal. Sin embargo, las PYMEs y autónomos que desean internacionalizar el negocio se enfrentan al desconocimiento de la tributación a nivel internacional y necesitan ayuda de una asesoría fiscal internacional.
Normativa internacional
La normativa fiscal varía mucho entre países y esto añade complejidad a la fiscalidad internacional. Además, se producen modificaciones legislativas con frecuencia y surgen nuevas obligaciones. No podemos olvidar que el incumplimiento de la normativa puede suponer la realización de inspecciones y la imposición de sanciones. Por eso, es fundamental que la asesoría fiscal internacional que analice cada caso esté actualizada en la normativa vigente y en constante comunicación con sus clientes para prevenir cualquier riesgo.
Evolución de la tecnología
La evolución de la tecnología influye de distintas formas en la fiscalidad internacional:
- Permite un mayor control de las obligaciones fiscales.
- Facilita la transparencia tributaria.
- Ayuda a las empresas a realizar trámites de forma sencilla, rápida y sin errores.
Pero, por otro lado, ha hecho que puedan aparecer nuevas formas de evadir impuestos.
Para evitar este problema, las administraciones tributarias de muchos países están utilizando herramientas tecnológicas cada vez más sofisticadas para garantizar que los profesionales y las empresas cumplen con sus obligaciones.
La fiscalidad internacional, por lo tanto, es un tema complejo que requiere una comprensión profunda de las normativas fiscales locales y de otros países, así como de los convenios de doble imposición.
En LEIALTA, sabemos que gestionar la fiscalidad internacional puede ser un desafío abrumador, sobre todo para las empresas en expansión. Nuestro equipo especializado en asesoría fiscal internacional está aquí para ayudarte a navegar en este entorno complejo, asegurando que tu empresa cumpla con todas las normativas, minimizando riesgos y optimizando la carga fiscal. Nos encargamos de analizar tu situación específica, aplicar los convenios de doble imposición que correspondan y garantizar que aproveches todas las ventajas fiscales que las diferentes jurisdicciones puedan ofrecerte. Si necesitas ayuda, no dudes en contactarnos.
