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Los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la RSC en la PYME

Si eres fan del revival de los 80, seguro que las siglas OMD te dicen algo. ¡Bingo! Corresponden a Orchestral Manoeuvres in the Dark, el famoso grupo musical pionero del tecno-pop. Pero si en su lugar escuchas ODS, probablemente te suene a chino… aunque te toque mucho más de cerca, sobre todo si formas parte (o eres propietario) de una PYME. Estas siglas son el acrónimo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, una importante agenda de acciones acordada por las Naciones Unidas para los próximos años y que toca muy de cerca el tema de la Responsabilidad Social Corporativa en la empresa.

¿Qué son los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)? ¿Qué grado de responsabilidad tiene en pequeño y mediano empresario a la hora de hacerlos realidad? A continuación, la respuesta a estas y otras preguntas.

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la RSC

Vayamos por partes. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible son 17 objetivos acordados en una Agenda aprobada en septiembre de 2015 por la Asamblea General de Naciones Unidas: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible (ODS), que constituirá el marco global de desarrollo para los próximos quince años. Como parte de las Naciones Unidas, España está llamada a sumarse a esta iniciativa; y lógicamente, esto implica que el Gobierno que se establezca (más tarde o más temprano) tendrá que empezar a desarrollar dicha Agenda, cuyo desarrollo se extenderá durante los próximos 15 años (2030).

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible abarcan objetivos ambiciosos como pocos, a nivel (todo hay que decirlo) bastante general. Desde poner fin a la pobreza y el hambre en el mundo, hasta garantizar la salud, el bienestar, la educación y la sanidad de toda la población mundial. Todo ello, pasando por el cuidado del medioambiente y la consecución de la desigualdad. Puedes ver la agenda completa, con los 17 objetivos detallados, haciendo CLIC AQUÍ. Evidentemente, cualquier persona que se preocupe por su planeta y la sociedad en la que vive hará suyos estos objetivos; pero las empresas (y las PYMEs entre ellas) tienen mucha mayor capacidad de acción y pueden implementar acciones para desarrollarlos, como parte de sus planes de Responsabilidad Social Corporativa.

«Deberes» y beneficios para grandes empresas y PYMES

En el Artículo 67 de la Agenda acordada por los 193 Estados Miembros de la Organización, el papel de las empresas queda bien claro: “La actividad empresarial, la inversión y la innovación privadas son los grandes motores de la productividad, el crecimiento económico inclusivo y la creación de empleo. Reconocemos la diversidad del sector privado, que incluye tanto a las microempresas como a las cooperativas y las multinacionales. Exhortamos a todas las empresas a que aprovechen su creatividad e innovación para resolver los problemas relacionados con el desarrollo sostenible”.

Queda claro: más que imponer una obligación, lo que hace la ONU es animar a las empresas y PYMES a sumarse al carro de la Responsabilidad Social Corporativa para intentar hacer camino hacia la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Una excelente propuesta, más aún porque conlleva interesantes beneficios para los empresarios. Las empresas que se comprometan con lo indicado en la Agenda tendrán la oportunidad de:

  • Identificar futuras oportunidades de negocio, a través de la búsqueda y propuesta de soluciones innovadoras (tecnologías que persiguen la eficiencia energética, energías renovables, TICs que reduzcan emisiones y residuos, satisfacción de las necesidades de nuevos mercados inexplotados…).
  • Mejorar el valor de la sostenibilidad corporativa, incorporando la sostenibilidad en la cadena de valor para así protegerlo y crearlo. Por otra parte, muchos países han introducido multas y sanciones por incumplimiento, a fin de conseguir una internalización en las empresas de aspectos tratados en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (sin ir más lejos, en España existen sanciones que penalizan el incumplimiento de las políticas de igualdad de género).
  • Fortalecer las relaciones con los stakeholders, manteniéndose al día con el desarrollo de políticas y creando relaciones de confianza que reduzcan los riesgos empresariales (legales, de reputación…), constituyendo así la necesaria resiliencia frente a los costes.

Un nuevo concepto de sociedad… y de empresa

Por si fuera poco, dentro de sus planes de Responsabilidad Social Corporativa las PYMEs deberían tener en cuenta un factor fundamental, sobre todo de cara al futuro. Y es que las nuevas generaciones dan un mayor valor a la sostenibilidad, en comparación con generaciones anteriores. La propia ética del empleado, su compromiso y productividad se ven fuertemente influidas por esta percepción: esto supone una gran oportunidad para favorecer a la empresa que adopte medidas sostenibles, reteniendo el talento. Y por si fuera poco, los consumidores (de quienes depende que tu empresa siga adelante y proporcione beneficios) también tienen algo que decir al respecto, como colectivo cada vez más responsable.

Principios reconocidos a nivel internacional

Todo esto no constituye solo un bonito panorama, que las empresas y PYMES pueden (o no) incorporar a sus planes de Responsabilidad Social Corporativa. Estas políticas forman parte de una serie de principios reconocidos a nivel global por parte de organizaciones tan poderosas como la OIT o la ONU, estando así presentes en la Declaración Tripartita de Principios de la OIT Sobre las Empresas Multinacionales y Política Social, en los Principios del Pacto Global de las Naciones Unidas y en los Principios Rectores sobre las Empresas y los Derechos Humanos.

Por otra parte, y como te comentábamos en nuestro artículo sobre cómo implantar la Responsabilidad Social Corporativa en la PYME, la ISO26000 pone a disposición de las empresas una guía práctica sobre cómo hacerlo (bien), mientras que la OCDE también deja claras sus Líneas Directrices para empresas multinacionales.

Vale: ya sabes por qué. Y ahora… ¿Cómo?

¿Cómo adaptar la política de Responsabilidad Social Corporativa de tu empresa para perseguir la consecución de los ODS? Para ello, nada mejor que basar cualquier plan que establezcas en estos tres puntos:

  • Es vital un conocimiento en profundidad del estado de tu empresa en relación a los 17 objetivos de las ODS.
  • Identifica y define tus prioridades de actuación en base al resultado de tu análisis, estableciendo tus propios objetivos (alineados con los 17 ODS).
  • Anuncia tu alineamiento y haz público tu compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, a fin de convertirte en un elemento inspirador para todos sus stakeholders.

En Leialta te animamos a perseguir y conseguir estos objetivos, y te ayudamos durante todo el proceso. ¿Es complicado? Por supuesto, pero con una asesoría profesional de calidad todo te resultará mucho más sencillo. ¿Es gratificante? Mucho más, tanto para tu empresa como para el entorno social y medioambiental en el que se inscribe, y donde desarrolla sus acciones.

Perseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible es la vía para lograr que las empresas (PYMEs y multinacionales) contribuyan a lograr un mundo y una sociedad más justos, con beneficios y ventajas para todos. ¿Crees que son objetivos alcanzables? ¿Cuál piensas que es la labor de las empresas y PYMEs al respecto? Déjanos tu comentario.

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Imagen: www.un.org.

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