Si aún no eres consciente de las ventajas de la RSC para las empresas, es porque no has seguido nuestro blog. Es el momento de ponerte las pilas y echar un vistazo a toda la información sobre responsabilidad social corporativa que hemos ido desgranando a lo largo del año: relevancia, beneficios, salario emocional… Un sinfín de aspectos positivos que las empresas están empezando a valorar, y mucho.
Y quien dice las empresas, dice el Estado: hoy día, tener una política clara de Responsabilidad Social Corporativa es un valor añadido a la hora de optar a licitaciones y concursos públicos. En algunos casos, incluso más: que las empresas cumplan una serie de requisitos relacionados con la responsabilidad social corporativa se ha convertido en un factor imprescindible a la hora de poder acceder a determinados concursos. ¡Conoce cuáles son las ventajas de la RSC para las empresas que hacen sus deberes!
Las ventajas de la RSC de cara a la administración pública
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Para hablar con conocimiento de causa de las ventajas de la RSC con respecto a la posibilidad de optar a concursos y licitaciones públicas, es fundamental conocer bien qué hace la Administración para fomentar la inclusión de aspectos sociales en las empresas. Esperar que los empresarios implanten políticas de RSC de motu propio puede hacer que el camino hacia un futuro más respetuoso y sostenible sea muy largo… Así que los poderes públicos han optado por echar mano a todas sus “armas” para fomentar estas acciones.
A este respecto, el Observatorio de Responsabilidad Social Corporativa de España publicó en el año 2015 un documento fundamental: Políticas Públicas y de RSC. Propuesta de políticas públicas para el fomento de la responsabilidad social. El texto no tiene desperdicio, pero en este caso lo que más nos interesa es lo referido a la contratación. Entre muchas otras cosas, el documento indica lo siguiente: «Las autoridades, al ejercer su función de administradores de lo público y al adquirir bienes, obras o servicios, han de procurar cuidar tres pilares del desarrollo sostenible: criterios económicos, sociales y medio ambientales. […] Enmarcar las compras públicas dentro de un contexto de responsabilidad social puede, además, redundar en beneficios directos y significativos sobre el medio ambiente, el mundo laboral y la cooperación al desarrollo, contribuyendo de forma directa a un desarrollo sostenible.»
Cumplir con la ley: sí… o sí
Las empresas que cuidan las políticas sociales y medioambientales tienen la opción de disfrutar de manera preferente de las ventajas de la RSC. Pero aún hay más: está la cuestión de la obligación. Leyes como la Ley General de los Derechos de las Personas con Discapacidad y de su Inclusión Social (más conocida como Ley General de Discapacidad – LGD), derivada de la antigua LISMI y otras normativas, son de obligado cumplimiento para todas las empresas. Ya en la LISMI se establecía “para las empresas públicas y privadas, con una plantilla superior a 50 trabajadores, la obligación de contratar a un número de trabajadores con discapacidad no inferior al 2%.”
Por otra parte, como hemos comentado en otras ocasiones, la implantación de un Plan de Igualdad que equipare los derechos entre mujeres y hombres y eliminen barreras y desigualdades es hoy día obligatorio (no dejes de informarte sobre por qué los planes de igualdad son interesantes para tu empresa: te sorprenderás). Siendo como son medidas que se incluyen en la estrategia de RSC de las empresas, en este caso no son voluntarias para todas: quien esté obligado y no las cumpla se expone a verse penalizado con sanciones muy importantes.
El caso de la Diputación de Málaga
En lo que respecta a contratos y licitaciones públicas, las ventajas de la RSC quedan bien reflejadas en la medida que la Diputación de Málaga tomó a principios del año 2014. El organismo público decidió incluir una cláusula de RSC en concursos públicos que será determinante en caso de empate entre dos empresas concursantes. Una medida inteligente: las empresas no están “obligadas” a tener políticas de RSC más allá de lo que manda la ley, pero el hecho de tenerlas les dará puntos cruciales para posicionarse en primera línea ante sus competidores.
En resumen: gracias a las ventajas de la RSC, el empresario inteligente no tardará en descubrir que implantar políticas de responsabilidad social corporativa en la empresa no es un gasto, sino una inversión. El retorno que la empresa obtiene a medio plazo no solo se refiere a la contratación pública, sino que abarca un gran número de beneficios encaminados a posicionarla en cabeza.
No lo dejes para mañana
Seguro que todo lo que te hemos contado te ha hecho reflexionar sobre las mil posibilidades y ventajas de la RSC, especialmente de cara a poder acceder a concursos públicos. Diseñar un plan de responsabilidad social corporativa puede ser lo que tu empresa necesita para despegar, y para convertirse en un motivo de orgullo tanto para ti como para sus trabajadores. En Leialta tenemos los mejores expertos en materia de Responsabilidad Social Corporativa: déjanos asesorarte y diseñaremos la mejor estrategia para tu caso particular.
¿Has pensado en implementar medidas de RSC en tu empresa? ¿Crees que las ventajas que te hemos comentado son reales y eficaces? ¡Danos tu opinión!
Muchísimas gracias por ofrecernos las ventajas de las rsc en licitaciones y concursos. Muy a tener en cuenta. Un post realmente interesante.
Hola Santiago,
Gracias por tu valoración hacia el contenido de esta publicación. Espero que te haya ayudado a solventar tus dudas.
Un saludo,
Javier Martínez
Estupendos consejos y datos. La verdad es que tiene sus ventajas y en muchos casos son una gran oportunidad
Hola Lucas,
Gracias por tu valoración hacia el contenido que creamos. ¡Esperamos que te haya servido de gran ayuda!.
Un saludo,
Javier Martínez